Magnífico ambiente el vivido el viernes por la noche en la Taberna El Martillo, donde celebramos la tradicional Cena de Navidad del Club. Allí nos juntamos un buen grupo de mandaraches, con parejas y también niños, a compartir mesa y mantel, conversaciones de toda índole (aunque carreras y lesiones parecen los temas favoritos) y, cómo no, fotografías y brindis.
El presidente del Club, José Antonio Francés, aprovechó para pedir compañerismo y el mejor ambiente. Aunque no hacía falta, porque ambas cosas se vivieron intensamente durante toda la velada que, como decimos, empezó con la cena y terminó, ya bien entrada la madrugada, con baile y copas.
Despedimos el año de la mejor manera posible: Juntos. Como diría el Gran Wyoming, "mañana más, pero no mejor, porque es imposible". Así sea.
