La verdad es que ayer era un día para no salir de casa, debido al viento frio que hacía, sobre todo durante el transcurso del Duatlón de San Pedro, celebrado en la playa de la Mota en Lo pagán. Apetecía quedarse viendo al Cartagena aunque se borrase del partido al ser bailado por los Thiagos y Nolitos de turno. Pero aún ganando el Cartagena 0-3 que por desgracia fué al contrario mereció la pena ir, porque ayer fuimos testigos de la grandeza que puede ser el deporte.
No me quedaba ninguna duda del ejemplo tanto deportivo como personal que nos dá día a día nuestro compañero Raul Guevar Castellar.El no llegará al 1.65m de altura y no se si pasa de los 55 kilos, pero ayer fué un auténtico Yao Ming o un Gasol para los que no esteis muy duchos en lo del baloncesto.
En este "circo" de las competiciones de duatlón, hay un nuevo "Enganchado" en este deporte. Su nombre es Rubén Galván. Gran ciclista, en otro tiempo incluso profesional. El otro día en Los Camachos, Rubén en dura pugna con nuestro Raul estuvieron luchando por la victoria final. En aquel día y el motivo es lo de menos, Rubén se confundió de carril, trazado... lo que le hizo perder unos preciados segundos, los cuales nunca se sabrá si serían determinantes para el haber vencido en la prueba a Raul.
Ayer Raul hizo algo tan sorprendente como GRANDE en esta época que vivimos.Cortó por lo sano, sin anestesia como a mí me gusta. Quiso compartir el 1º puesto de la carrera con Rubén, entrando los dos cogidos y cediendo el metro final para que su gran rival que se vislumbra esta temporada, entrase y así dejar muiy claro que la caballerosidad y la deportividad debe prevalecer ante todo. Mas merito si cabe, cuando en el Duatlón de San Pedro había premios económicos.
Raul eres un pequeñajo en estatura, pero eres un Tachenko y un gentleman en el saber estar.
Que juegue el Cartagena el Sábado que yo estaré en el Duatlón!